No tiene porque pasarte si tienes un buen sistema de alarmas o seguiste nuestros consejos antes de irte de vacaciones. Sin embargo, nadie está libre de ser víctima de un robo. Volver a casa tras unos días de descanso y descubrir que te han robado es una experiencia muy desagradable que no se la deseamos a nadie. Así es como hay que actuar en esos difíciles momentos.

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Mantener la calma

Resulta difícil tras el disgusto pero no hay que dejarse llevar por el pánico o los nervios. Hay que intentar estar lo más sereno posible para pensar claridad y también para no asustar al resto de miembros de la familia, en especial a los más pequeños. Y, por supuesto, si hay la mínima sospecha de que el ladrón sigue en la casa hay que abandonar la estancia inmediatamente para no correr riesgos.

Llamar a la policía  

Esperar un solo minuto ya es mal. Llamar a las fuerzas de seguridad es la primera medida que debe adoptarse en el mismo instante en el que se comprueba que han entrado en casa. El teléfono de la policía es 091 o también puedes llamar al de emergencias 112. El tiempo corre en tu contra y cuanto más rápido llames antes podrás resolverlo todo.

No tocar nada

Hasta que llegue la policía no toques absolutamente nada. Cualquier movimiento puede destruir pruebas y entorpecer la investigación policial. Todo tiene que estar en la misma posición que cuando llegaste.  Las fuerzas de seguridad te lo agradecerán y también cualquier información que puedas darle. Así que nos seas parco en palabras con ellos.

Examinar la casa

Una vez la policía nos da vía libre para movernos libremente por el domicilio hay que realizar un exhaustivo inventario de lo robado y dañado. Examina la casa habitación por habitación y anota todo lo que te falta o te han roto. Es interesante buscar las facturas de lo sustraído ya que serán de utilidad a la hora de reclamar al seguro.

Informar a tu banco

Si te han robado las tarjetas de crédito llama inmediatamente a tu banco para que anule todo lo necesario. También si se han llevado ordenadores, tablets, smartphones o cualquier soporte digital con el que se pueda acceder a tu información bancaria, Por otro lado, si lo que te falta son el carné o el pasaporte, comunícaselo  a las autoridades y evita suplantaciones de identidad.

Formalizar la denuncia

En un plazo de 72 horas es muy importante acudir a una comisaría e interponer una denuncia formal.  En ella hay que indicar con detalle los daños que ha sufrido la vivienda y todo lo robado. No te preocupes si en un primer momento se te olvida algo, se pueden ampliar los datos unos días más tarde. Finalmente pide una copia-resguardo de la denuncia, es indispensable para que tu seguro del hogar proceda a peritar los daños.

Avisar a la compañía de seguros.

Con el resguardo de la denuncia a mano llama a tu compañía de seguros. Indícales todo lo sustraído y presenta los tickets y facturas que hayas podido recopilar. Lo habitual es reclamar, además de los objetos robados, los daños en la vivienda como las ventanas rotas o las puertas forzadas.

Proteger de nuevo la vivienda

No tardes mucho en reparar las puertas y ventanas rotas, total ya no te queda más remedio que hacerlo.  Puedes aprovechar la coyuntura para reforzar la seguridad de tu hogar con puertas blindadas o un sistema de alarmas. Después de lo sucedido seguro que no quieres que se vuelva a repetir y los sistemas de seguridad profesionales son la mejor medida preventiva.