Ahora que ya nos hemos familiarizado con los tipos de bocas de incendios y sus diferentes elementos, llega la hora de la acción. Hay un incendio y necesitamos recurrir a nuestra boca de incendios perfectamente instalada y homologada. Sin embargo, su uso no es ninguna tontería y puede resultar incluso peligroso para terceros.  Lee atentamente esto para una utilización responsable.

¿Cuándo utilizarla?

Solo hay que utilizarla en los casos en que las llamas alcanzan tal envergadura que los extintores portátiles no son efectivos.  Antes de hacerlo es importante comprobar que la manguera llega al incendio. También que tú tengas la posibilidad de evacuación en caso de que no se pueda sofocar el incendio y vaya a más .

¿Cuántas personas son necesarias para utilizar  una boca de incendios?

Aunque las mangueras de 25 mm de diámetro y semirrígidas pueden llegar a utilizarse por una sola persona, normalmente necesitaremos dos personas para un buen manejo y control  de una boca de incendio. La manguera pesa y arroja un chorro de gran presión que puede llegar a hacerse incontrolable. De esta manera también, evitamos caídas y golpes inesperados.

¿Cómo se organizan dos personas para utilizarla?

–  Una persona agarrando con firmeza la boquilla de la manguera totalmente desenrollada en dirección hacia el fuego pide a la otra persona abra la válvula de paso de agua del armario.

– La otra persona que abre la válvula de paso de agua del armario se encamina después a sujetar por la espalda a quien está agarrando la boquilla al tiempo que ayuda a sujetar el peso de la manguera.

–  Cuando esté la manguera presurizada y las dos personas en posición para contener el impulso hacia atrás por la presión se puede proceder a abrir la boquilla y dirigir el agua hacia el fuego para sofocarlo.

Éstas dos personas pueden darse relevo en caso de que el incendio sea persistente.

¿Qué tipo de salida de agua se selecciona?

Las opciones de posición de la boquilla determinan cómo sale al agua posibilitando su ajuste a las circunstancias del fuego. Las formas más frecuentes de salida del agua son:  agua pulverizada o en chorro.

Agua pulverizado es adecuado…   en fuegos de la clase “A” (fuegos de materiales sólidos que dejan brasas) y de la clase “B” (fuegos de líquidos o de sólidos licuables) cuando se trate de líquidos combustibles pesados como el fuel-oil, gas-oil…  También cuando hay mucho humo ya que hace un efecto de pantalla protectora.

Agua en chorro… solo debe utilizarse en fuegos de clase “A”. Es importante controlar su ángulo de salida ya que al golpear sobre  materiales éstos pueden salir lanzados.

¿Cómo se apaga el fuego?

Siempre se debe empezar con movimientos suaves, de barrido y dirigidos a la base del fuego; se va avanzando poco a poco desde los extremos. Cuando el fuego ha sido causado por líquidos inflamables y para evitar que el incendio se extienda por la presión de la salida de agua, debe proyectarla superficialmente.

Cosas a tener en cuenta

  • No dirija el agua en chorro hacia personas (las empujaría con fuerza).
  • El agua fría estará por el suelo que pise lo que puede provocar el riesgo de resbalar y de caer.

Aunque siempre es mejor no utilizar nunca tu boca de incendios, esperamos que estos consejos os hayan sido de ayuda.

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[FUENTE: INSHT]